Matame si no te sirvo…
Soy un tipo joven, tengo cuarenta y un años, inteligente, preparado y capaz, tengo experiencia laboral y de vida, la madurez necesaria para ser absolutamente responsable de lo que hago y hacerme cargo de mis errores, pago mis capacitaciones y no dejo de hacerlas, un lujito.
Mi sueldo no es lo que quisiera por lo que, inspirado por una amiga que si necesita trabajar, me puse a navegar las propuestas laborales que hay en mi profesión y dentro de mi perfil, encontré, las hay y muchas, la informática en mi país tiene muchas ofertas laborales y poca gente que las cubra; pero un detalle, me paso sistemáticamente en por lo menos seis años de lo que esperan los empleadores.
Que interesante, puedo aun empezar una familia, edificar una vivienda, votar, hacer el amor, cocinar y muy bien, escribir, pelearme físicamente y hasta ganar, pero no puedo aspirar a un nuevo empleo en una empresa privada, sin pasar siquiera por un test que evalué mi preparación, menos mal que, aunque no bien pago, tengo trabajo. ¿Y quién no lo tiene?, mas allá de lo preparado que este, es una verdadera odisea conseguir ya no digo un trabajo acorde a la capacitación, si no cualquiera, aun hay algunos ilusos que pretenden llevar algo de pan a su mesa, y encima ganárselo trabajando.
La tremenda y constante angustia de aquellos que tratan de reinsertarse en el mercado laboral a una edad superior a los cuarenta es algo que, a menos que se este viviendo es imposible de transmitir, la desazón, la perdida de fe, la impotencia que esto conlleva no se puede transmitir en simples palabras.
Hoy, de este lado de la vereda no me quejo de lo que tengo, independientemente de que no este pasando por mi mejor momento económico, tengo un sueldo a fin de mes, que con algo de ingenio me permitirá sobrevivir, que no es poco, pero miremos alrededor, encontraremos a un familiar, algún amigo, un ser muy querido, viviendo esta pesadilla que comienza cada día al despertar, al empezar de nuevo la dura tarea de conseguir un trabajo, este o no capacitado, y en algunos casos, muy capacitado.
Mucho se ha dicho de esto, en todos los medios de comunicación existentes y en la mayoría de las culturas occidentales, hoy por hoy es un anatema el portar mas de cuatro décadas sobre la piel, por que la responsabilidad, la capacidad, la preparación y la experiencia, no son como debieran, factores decisivos a favor en un currículum, si no que son un estigma que algunos privilegiados, debemos soportar por el solo hecho de tener cuarenta años o mas, matame si no te sirvo....
Este posteo lo hice el año pasado, pero dada su vigencia, al releerlo, decidi volver a ponerlo en la cancha, poco mas puedo decir al respecto, piensenlo.
16 Perplejos:
Publicar un comentario