Valores.

A veces desde lo científico quisiera saber que tan evolucionados estaremos, realmente, los humanos. Los valores que cada civilización le otorgan a las cosas, en lo global, son muy disímiles, en algunas cosas que para nosotros no tienen importancia para otras son fundamentales, sobran ejemplos, pero en todo caso se los dejo como tarea para el hogar, no quiero hacer enumeraciones a esa escala. Ahora bien, dentro de una misma sociedad, para sus propios miembros, el valor relativo de las cosas, también puede ser muy diferente y aquí, quizás, entren en juego parámetros psicológicos que, al no tener los conocimientos específicos, no domino, pero eso no quita que pueda reflexionar, con todas las posibilidades del mundo de equivocarme.

Cada persona es de por si valiosa, simplemente por el hecho de ser, como dije , persona, así es y así se nos debería respetar en toda circunstancia, el problema esta en que no todos están en condiciones de hacerlo, vaya a saber Dios por que, podría ser por que su propia métrica de la vida esta distorsionada por lo aprendido y vivido desde la infancia, puede que este distorsionada por algún trauma psicológico o por una sencilla inadaptabilidad social, sea cual fuera la causa, es probable que ante esas circunstancias un individuo sufra y otro haga sufrir.

No existen los superhéroes ni ese milagroso rayo Divino que bajaría del cielo a poner en orden las cosas, y como consecuencia de ese hueco tan importante, hay vidas que se transforman en un doloroso Vía Crucis del que no siempre se puede escapar, al menos de manera volitiva y racional. Tiemblo de solo pensar, cuando un alma torturada cruza el limite de lo soportable, las decisiones que se pueden llegar a tomar, las formas de escape elegidas, lo que ese individuo y su entorno puede perder por esa decisión fruto del dolor.

Lleva muchos años fabricar una persona, y el conocerla y valorarla puede llevar apenas momentos, cuando a nuestro alrededor alguien toma la final decisión de terminar con su dolor, el que sea, pero que va mas allá de lo que esa persona siente que puede manejar y mucho menos soportar, de una manera drástica y definitiva; se abre un profunda herida en aquellos que de alguna manera interactúan con ella, una herida que es mezcla de impotencia, de cariños frustrados y otras sensaciones que no soy capaz de explicar, la sensación postrera de sentir que quizás, algo se hubiera podido hacer, la certeza de saber que siempre algo se puede hacer.

A buen entendedor pocas palabras, la vida es un largo camino lleno de obstáculos, algunos mayores que otros, algunos de mucho sufrimiento, pero mientras haya aliento en los labios, y latidos en el corazón, el destino, no necesariamente mezquino, nos puede mostrar una vereda totalmente diferente pero que se puede recorrer con felicidad, como sea, la decisión final es efectiva, pero, por mucho que duela, no es la mas valiente, cada nuevo día, al abrir los ojos, tendremos todo un día de esperanza en que podemos cambiar las cosas y si en todo caso algo es verdaderamente inevitable, recorrer ese tramo del camino de la mejor manera posible, concientes de nuestro propio valor y haciéndole una apuesta a la vida y al destino. Me parece que hoy ando melancólico.